Solo 14 de cada 1,000 viviendas estadounidenses, o poco más del 1%, han cambiado de propietario en lo que va de 2023, lo que supone la tasa de rotación de viviendas más baja en al menos una década. Las tasas de rotación miden efectivamente la disponibilidad de viviendas, lo que significa que los posibles compradores de viviendas tienen pocas opciones.

La tasa de rotación prepandémica era de aproximadamente 20 de cada 1,000 viviendas vendibles en el primer semestre de 2019, según Redfin. Freddie Mac había estimado en 2018 que el mercado inmobiliario necesitaba otros 2.5 millones de viviendas nuevas para satisfacer la demanda. Entonces llegó el cóctel perfecto para la venta de casas nuevas: la pandemia, el trabajo a distancia, los tipos de interés bajos y una plétora de tiempo libre.

Pero al mismo tiempo que se reducía la oferta, la rápida inflación provocó una subida de los tipos de interés. En junio, por primera vez, la vivienda media se vendió con un precio medio de venta que alcanzó su máximo histórico.