Por segunda vez este año, un tribunal ha fallado en contra del intento de Johnson & Johnson de utilizar un procedimiento de quiebra para limitar su exposición a decenas de miles de demandas que alegan que sus productos de talco causan cáncer.
Los demandantes afirman que la empresa conocía desde hace décadas los riesgos asociados a sus productos de talco, entre ellos sus emblemáticos polvos de talco para bebés.
La empresa creó una filial, LTL Management, en 2021 como maniobra para protegerse de los litigios por el talco. Propuso que la filial, que se había declarado en quiebra, pagara 8,900 millones de dólares para resolver todas las demandas en su contra.
Pero el viernes, el juez Michael Kaplan del Tribunal de Quiebras de EE.UU. para el Distrito de Nueva Jersey, dijo que el caso de quiebra de LTL debe ser desestimado porque las demandas no pusieron a la empresa en “dificultades financieras inminentes o inmediatas”.