Un reciente informe de la Comisión Internacional de Límites y Aguas, al cual Univision San Antonio ha accedido, ha arrojado luz sobre la polémica instalación de boyas en el Río Bravo ordenada por el gobernador de Texas, Greg Abbott. Sorprendentemente, el 79% de estas boyas, diseñadas para frenar la inmigración, se encuentran en aguas mexicanas.
El estudio establece que las boyas, que miden cerca de 995 pies de largo, cruzan significativamente hacia el lado mexicano, según la Línea Límite Internacional. Esta revelación respalda la demanda presentada por el Departamento de Justicia de EE. UU. contra la administración de Abbott, alegando violación de la Ley de Apropiación de Ríos y Puertos.
El caso ha ganado notoriedad desde que un empresario local presentara la primera queja, cuestionando el impacto económico en sus negocios turísticos. La fecha clave para una decisión judicial está programada para el 22 de agosto de 2023.