La comunicación es fundamental en una relación de pareja saludable, pero expresar lo que te molesta puede ser un desafío. Afortunadamente, existen formas de comunicar tus frustraciones sin lastimar a tu ser amado.
En primer lugar, es importante elegir el momento adecuado para hablar. Espera un momento en el que ambos estén calmados y dispuestos a escuchar. Evita abordar el tema cuando estén cansados o estresados.
En segundo lugar, utiliza un lenguaje asertivo y evita los ataques personales. En lugar de decir “siempre haces esto mal”, intenta expresar cómo te sientes y cómo podrían mejorar juntos. Por ejemplo, puedes decir: “Me siento frustrado cuando no compartimos las tareas del hogar de manera equitativa. ¿Podemos encontrar una solución juntos?”
Además, practica la escucha activa. Permítele a tu pareja expresar sus sentimientos y evita interrumpir. Muestra empatía y trata de comprender su perspectiva.
Recuerda que la comunicación es un proceso bidireccional. Anima a tu pareja a expresar también sus molestias y trabajen juntos para encontrar soluciones.