El martes, el mundo del béisbol lamentó la triste noticia del fallecimiento del legendario ex tercera base de los Baltimore Orioles, Brooks Robinson, a los 86 años. Conocido como “el aspiradora humana”, su legado perdurará en la memoria de los fanáticos de los Orioles y de toda la liga.
Robinson pasó sus 23 temporadas de carrera con los Orioles, ayudándolos a ganar dos Series Mundiales. Sus estadísticas impresionantes incluyen un promedio de bateo de .267, 268 jonrones y 1,357 carreras. Además, ganó 16 premios Gold Glove consecutivos, un récord solo superado por Greg Maddux y empatado por Jim Kaat.
Después de su retiro, sirvió como presidente de la Asociación de Antiguos Jugadores de las Grandes Ligas de Béisbol durante 33 años.
El comisionado de MLB, Rob Manfred, elogió la destreza defensiva de Brooks y su contribución al juego, destacando su excelencia, durabilidad y lealtad.
Robinson será recordado no solo como un gigante del béisbol, sino como un caballero que representó el juego de manera ejemplar, tanto dentro como fuera del campo.