Elon Musk está una vez más minimizando públicamente los riesgos de Covid-19.
En una amplia entrevista con la periodista Kara Swisher, el director general de Tesla y SpaceX dijo que no tomaría la vacuna Covid-19 cuando estuviera disponible, y se negó a decir si siente la obligación de pagar a los empleados que quieran quedarse en casa para evitar contraer el virus.
“No estoy en riesgo por Covid, ni tampoco mis hijos”, dijo Musk durante el episodio del podcast del New York Times “Sway”.
Musk ha cultivado durante mucho tiempo la figura pública de un empresario excéntrico que sabe más que los expertos y no teme ofrecer opiniones controvertidas.
En el podcast, Musk argumentó que en lugar de las órdenes de quedarse en casa para mitigar la propagación del coronavirus, “cualquiera que esté en riesgo debe ser puesto en cuarentena hasta que pase la tormenta”.
Cuando Swisher se enfrentó a Musk con la posibilidad de que la gente siguiera muriendo en el proceso, respondió sin rodeos: “Todo el mundo muere”.
“La pregunta es qué, en definitiva, sirve al bien mayor”, continuó Musk, añadiendo que los cierres no lograron eso y que la pandemia es una “situación sin salida”.
Musk, la tercera persona más rica del mundo según el índice de multimillonarios de Bloomberg, publicó en abril que las órdenes de quedarse en casa a nivel nacional equivalían a un “arresto domiciliario de facto”.
Si uno de sus trabajadores le dice que venir a trabajar pondría en peligro a su familia, Musk dijo que simplemente les diría que “se quedaran en casa permanentemente”.