El gobernador republicano Ron DeSantis compartió con la prensa que un grupo de hackers de Rusia tuvo acceso a la bases de datos de los votantes en dos condados de Florida antes de las elecciones presidenciales que se llevaron a cabo en el 2016.
También aclaró que los datos únicamente fueron robados, mas no hubo alteraciones en los resultados de las elecciones.
El gobernador prometió al FBI que no revelaría los nombres de los condados, pero varios funcionarios electorales están presionando para que se revelen los nombres.
Al parecer el ataque cibernético provino por medio de un email con un virus, el cual un funcionario hizo clic para ver su contenido.
Por el momento serán confidenciales los nombres de los trabajadores implicados en el robo de la base de datos, así como los condados afectados. Cabe aclarar que el gobernador no estuvo enterado de lo ocurrido durante su ejercicio.