Los líderes del Grupo de los 20 países instaron hacia una mayor cooperación mundial para garantizar que las vacunas contra el coronavirus lleguen más allá de las regiones más ricas, ya que las prometedoras vacunas estadounidenses parecen estar más cerca de su aprobación.

Los comentarios dibujan claros contrastes con el enfoque de la administración Trump, incluyendo su ruptura con la Organización Mundial de la Salud. Los llamamientos también suscitaron preguntas sobre si las vacunas fabricadas en los Estados Unidos llegarían a estar ampliamente disponibles más allá de los acuerdos comerciales una vez que el presidente electo Joe Biden asuma el cargo, incluso cuando los Estados Unidos luchan con el mayor número de muertes por coronavirus del mundo.

Con los líderes conectados por enlace de video – y Arabia Saudita como anfitrión – la atención se dirigió rápidamente a las vacunas, ya que los resultados prometedores de los laboratorios estadounidenses Pfizer y Moderna despiertan esperanzas de que pronto haya armas adicionales contra la pandemia, y China y Rusia planean la expansión de sus vacunas.

En breves comentarios al grupo, el presidente Trump dijo que Estados Unidos ha “reunido todos los recursos” contra el coronavirus y señaló la “velocidad récord” para desarrollar vacunas y otras terapias, según un resumen de las declaraciones de la Casa Blanca.

Sin embargo, no se comprometió a ampliar la disponibilidad de las vacunas estadounidenses.