Salma Hayek es una de las actrices mexicanas que más éxito ha tenido en Hollywood. Ha aparecido en películas como Frida, Four Rooms y Grown Ups, entre muchas otras, sin embargo, en torno a su vida privada, muchos opinan que su unión con el empresario francés François-Henri Pinault, dueño de un imperio de marcas de lujo, se debe a su gran fortuna, cosa que le resulta sumamente ofensiva a la también empresaria.

Esto lo dejó claro recientemente en un capítulo de “Armchair Expert”, el podcast semanal presentado por el actor, director y escritor estadounidense Dax Shepard y Monica Padman, donde invitan a personalidades, periodistas y académicos a exponer sus ideas sobre “el desorden de ser humano”.

En la emisión, Hayek señaló:

“A ver, en las fotografías no puedes ni empezar a hacerte una idea de lo increíble que es. Me ha hecho convertirme en mejor persona, y me ha ayudado a crecer de una manera muy sana, muy positiva. Al principio, todo el mundo decía que el nuestro era un matrimonio de conveniencia, y que yo me había casado por dinero. No me importa, que piensen lo que quieran: llevamos 15 años juntos y seguimos muy enamorados”.

Lo curioso es que la actriz fue quien se formó una idea preconcebida de su ahora marido y padre de su única hija, sin molestarse en conocerle mejor, basándose únicamente en que él ya tenía tres hijos de relaciones anteriores. Sin embargo, reveló que Pinault la hizo cambiar de opinión poco a poco hasta hacerle ver que, aunque en un principio no le pareciera que era su tipo, en realidad era el hombre de su vida.

“Él termina de trabajar, sin importar lo duro que haya sido el día, y créeme que cuenta con muchas responsabilidades, y siempre tiene una sonrisa en la cara, se alegra de volver a casa, de verme a mí y a los niños para intentar hacernos reír”, destacó la mexicana de 54 años, entre muchas otras cualidades del afortunado francés, quien tiene 58 años de edad.