El director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) dijo que la agencia podría revisar sus orientaciones, que exigen un mínimo de dos metros de distancia entre los estudiantes en las escuelas de zonas con alta transmisión de coronavirus. El cambio de la orientación a tres pies, en lugar de seis, permitiría que muchas más escuelas volvieran a tener estudiantes a tiempo completo.

Ante la creciente preocupación por el coste social que supone que los alumnos no estén en las aulas, algunos expertos cuestionan la base de la orientación de dos metros. Un estudio reciente realizado en Massachusetts descubrió que no había una diferencia significativa en las tasas de infección en las escuelas que exigían al menos dos metros de distancia frente a las que sólo exigían un metro, cuando tanto los alumnos como los profesores estaban enmascarados.