Los estadounidenses de la mitad derecha del espectro político han tendido a menospreciar el riesgo de Covid-19. Han estado menos dispuestos a usar máscaras o a evitar las reuniones en interiores y han sido más reacios a vacunarse.
Estas actitudes forman parte de un patrón más amplio en el que los conservadores estadounidenses suelen mostrarse escépticos ante las advertencias de los científicos en materia de salud pública, en relación con el cambio climático, la contaminación atmosférica, la violencia con armas de fuego, los almuerzos escolares, etc. En el caso de Covid, los políticos republicanos y las figuras de los medios de comunicación han fomentado un comportamiento arriesgado al hacer declaraciones falsas sobre el virus.
Para muchos liberales-demócratas, Covid se ha convertido en otro ejemplo de la hostilidad del Partido Republicano moderno hacia los hechos y las pruebas. Y esa acusación tiene ciertamente algo de verdad. Pero la historia particular de Covid es también más complicada, porque los conservadores no son los únicos que malinterpretan las pruebas científicas de forma sistemática. Los estadounidenses de la mitad izquierda del espectro político también lo hacen.
Esta es la principal conclusión de una encuesta realizada por Gallup y Franklin Templeton a 35,000 estadounidenses. En ella se constata que tanto los liberales como los conservadores tienen percepciones erróneas sobre la pandemia, en direcciones opuestas. “Los republicanos subestiman sistemáticamente los riesgos, mientras que los demócratas los sobrestiman sistemáticamente”, escriben Jonathan Rothwell, economista principal de Gallup, y Sonal Desai, ejecutiva de Franklin Templeton.