Los demócratas del Congreso están presentando una ley para transferir 1,000 millones de dólares de financiación de un polémico nuevo misil balístico intercontinental al desarrollo de una vacuna universal contra el virus Covid.
La ley Investing in Cures Before Missiles (ICBM), presentada en la Cámara de Representantes y en el Senado el viernes, detendría la financiación del nuevo misil propuesto, conocido como disuasión estratégica terrestre (GBSD), que se prevé que cueste un total de 264,000 millones de dólares a lo largo de su vida útil.
En cambio, la vida del actual misil balístico intercontinental estadounidense, el Minuteman III, se prolongaría hasta 2050, y se encargaría un estudio independiente sobre la mejor manera de hacerlo.
“Estados Unidos debería invertir en una vacuna de prevención masiva antes que en otra nueva arma de destrucción masiva con base en tierra”, dijo el senador Edward Markey de Massachusetts, coautor del proyecto de ley.
“La Ley ICBM deja claro que podemos empezar a eliminar gradualmente la postura nuclear de la guerra fría que corre el riesgo de una guerra nuclear accidental sin dejar de disuadir a los adversarios y asegurar a los aliados, y redirigir esos ahorros a los peligros claros y presentes que presentan los coronavirus y otras enfermedades emergentes e infecciosas”.