Existen muchos factores que dañan el cabello, por ejemplo, las tinturas, el clima extremo, los malos hábitos de peinado, una alimentación deficiente, etc.
A continuación, te damos una lista de las principales causas:
LAVARSE CON AGUA MUY CALIENTE
Los expertos recomiendan lavarse el cabello con agua tibia para abrir la cutícula del pelo y que absorba el sistema de lavado. El agua muy caliente debilita la cutícula y los folículos.
Cuando se lava el cabello con agua muy caliente, este se quiebra con facilidad y se siente reseco, áspero, poroso y con frizz.
Es importante lavar el cabello con un champú y acondicionador formulado con proteína de elastina y aceite de linaza que reparan el cabello dañado.
USAR PLANCHA CON EL CABELLO HÚMEDO
Cuando se plancha el cabello cuando todavía está húmedo, este se quema.
También se debe usar un protector térmico antes de peinar con calor para proteger el cabello.
No debes pasar de una temperatura de 350 grados Fahrenheit.
PEINADOS AJUSTADOS
El hábito de mantener el cabello recogido y muy ajustado daña el cabello y puede generar calvicie prematura.
Se deben alternar los peinados entre el cabello recogido y el cabello suelto.
Si no te gusta usar el cabello suelto, te recomendamos llevar el cabello corto con un estilo pixie o corte bob, que son modernos y fáciles de peinar.