El gobierno de Biden se ve asediado por las peticiones de ayuda de líderes extranjeros para acceder a las vacunas COVID-19.
Pero aunque el presidente Joe Biden ha prometido que Estados Unidos sería “un arsenal de vacunas” para el mundo, sus asesores aún no han detallado cómo o cuándo empezaría a compartir el suministro estadounidense. En cambio, Biden ha dicho repetidamente que su administración sólo ayudaría al resto del mundo cuando todos los estadounidenses tuvieran acceso a las vacunas.
Esta postura es cada vez más insostenible, sobre todo ante el agravamiento de la crisis del COVID-19 en la India y el creciente abismo mundial en las tasas de vacunación, afirman los expertos y defensores de la salud mundial.
Este fin de semana, India ha batido otro récord con más de 400,000 nuevos casos diarios, y su número de muertes diarias se ha duplicado en el transcurso de 10 días (del 19 al 29 de abril).