Un hombre anciano estaba tomando un vaso de vino, sentado en un patio, al lado de su esposa y le dice:
– Te quiero tanto que no sé cómo podría haber vivido todos estos años sin ti.
Al oír esto, la esposa le pregunta:
– ¿Eres tú o es el vino el que habla?
Y él responde:
– Soy yo y estoy hablándole al vino…