Varios influencers europeos afirmaron que les han ofrecido dinero para que utilicen su presencia en las redes sociales con el fin de disuadir a sus millones de seguidores de recibir la vacuna contra el coronavirus de Pfizer-BioNTech por parte de una agencia sospechosa que, al parecer, las autoridades francesas creen que podría estar vinculada a Rusia.
Según los influencers, fueron contactados en línea y se les pidió que dijeran a sus seguidores que la vacuna de Pfizer es peligrosa y ha provocado más muertes que la desarrollada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford. Los organismos reguladores europeos y estadounidenses no han relacionado la vacuna de Pfizer con ningún efecto secundario de este tipo.
A principios de esta semana, el YouTuber francés Léo Grasset -también conocido como DirtyBiology- dijo que había recibido una propuesta “extraña” y adjuntó capturas de pantalla de la solicitud, en la que se le pedía que dijera falsamente a sus seguidores que “los medios de comunicación dominantes ignoran” el hecho de que la vacuna se ha relacionado con un alto número de muertes. Los mensajes informaban a Grasset de que la agencia disponía de un “presupuesto colosal” y que, si quería trabajar con la empresa, tendría que ocultar a los espectadores los detalles del patrocinio.