Un juez federal dictaminó que la ciudad estaba trasladando a las personas sin hogar a albergues colectivos sin tener en cuenta su salud.
El plan de la ciudad de Nueva York de trasladar a 8,000 personas sin hogar de los hoteles a refugios tipo barracón se vio interrumpido el martes cuando un juez federal dictaminó que los funcionarios no estaban teniendo en cuenta adecuadamente la salud de las personas trasladadas.
La sentencia impide a la ciudad trasladar a cualquier persona con discapacidad a otro lugar hasta que se evalúe si éste satisface sus necesidades. Debido a que la ciudad no sabe quién podría calificar para los llamados ajustes razonables, todo el programa debe hacer una pausa durante al menos una semana, dijo Joshua Goldfein, un abogado del personal de la Sociedad de Ayuda Legal, que presentó un recurso legal a los movimientos.
Unas 5,000 personas sin hogar siguen viviendo en hoteles. Un portavoz del Departamento de Servicios para Personas sin Hogar de la ciudad dijo que los funcionarios harían “pequeños ajustes en nuestro proceso” y reanudarían los traslados la próxima semana.
