De las sensaciones más hermosas que las mujeres embarazadas pueden percibir, son las patadas de su bebé, las cuales empiezan a ocurrir entre las semanas 16 a la 22, y las cuales según un estudio, pueden llegar a tener hasta 10 libras de fuerza.
Cuando un bebé patea mucho es una señal que está creciendo con huesos fuertes, aunque hay momento que se mueven tanto que incomodan a sus madres.
Para llegar a esta afirmación, midieron los movimientos fetales por medio de una resonancia magnética, durante diferentes semanas.
La inquietud del pequeño dentro de la panza a veces puede causar molestias en la madre, sobre todo en las noches, ya que su reloj biológico es distinto, pues cuando es de noche y se supone que deberían dormir, están más despiertos que en el día.