Las nuevas generaciones, aunque también lo hacen otros no tan “jóvenes” sienten una gran inclinación por las selfies, y, aunque creamos que es algo inocente, no lo es y aquí te contamos cómo las selfies afectan la memoria:
• Cualquier día quieres recordar determinado momento y si eso ocurriera hace 10 años, estarías dándole vueltas en la cabeza hasta recordar cuándo, cómo y porqué del momento; ahora, simplemente buscas en tu móvil las fotos almacenadas en este y encuentras casi instantáneamente una foto que te dice la fecha de lo ocurrido. Esto hace que tu cerebro vaya perdiendo su capacidad de recordar.
• Ya no razonamos ni pensamos como antes, porque todo lo tenemos en el móvil. Si queremos saber sobre algún tema, simplemente buscamos en nuestro celular y listo.
• Ahora, casi todas las conversaciones se hacen de manera virtual, dejando de lado las conversaciones frente a frente y así poder entender mejor al otro, saber que opinan y cómo se sienten realmente.
• Las selfies nos han vuelto personas narcisistas, porque nos miramos a nosotros mismos permanentemente, y, aunque en algunos casos es positivo ya que aumenta nuestra autoestima, al final, las personas que se hacen selies permanentemente, acaban en un ensimismamiento y se despreocupan de los demás y dejan lo demás a un lado. Así, estas personas no estudian, no leen y su memoria va disminuyendo.