En una reunión en vivo por Facebook, un pequeño niño preguntó a Maria Van Kerkhove, líder técnica de la OMS ¿cuándo va a terminar la pandemia de Covid-19?. Ella contestó:

“Voy a tratar de no llorar. Me gustaría saberlo”, le contestó la líder, pero su emoción no le permitió.

Entonces, el director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias de la OMS, Mike Ryan, respondió:

“Sé que terminará más pronto si le damos las vacunas una mejor chance de que lleguen a todo el mundo (…). Si nos protegemos a nosotros mismos y protegemos a los otros. Sé que terminará más rápido cuando los hospitales sean más robustos y capaces de dar atención. Si se da todo junto, quizá más pronto que tarde”,

Cuando se recuperó del llanto, Maria Van Kerkove le dio al niño su opinión:

“No tenemos aún una respuesta sobre cuán rápidamente esta pandemia va a terminar. Pero con tu ayuda, con la ayuda de tu hermano, con la ayuda de tus papás, y de otros niños alrededor del mundo, vamos a poder estar más cerca del final”.

Desafortunadamente existe mucha desigualdad en la vacunación mundial. Mientras que el 27,2 % de la población mundial ha recibido por lo menos una dosis de la vacuna contra el Covid-19 y el 13,8 % tiene su esquema de vacunación completo, en los países más pobres, solo el 1,1 % de la población ha recibido una sola dosis.

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