La esperanza de vida en todo el país se encuentra en el punto más bajo de los últimos 18 años, en gran parte debido a COVID-19. La esperanza de vida media al nacer cayó 1.5 años, pasando de 78.8 en 2019 a 77.3 en 2020. Esto es un indicador de que la salud de Estados Unidos está disminuyendo.

La tasa de mortalidad alcanzó 10.4 personas por cada 1,000 habitantes en 2020. Para contextualizar, la pandemia de gripe española dio lugar a una tasa de mortalidad histórica: 13.9 personas por cada 1,000.

La tasa de mortalidad ajustada por edad aumentó un 15.9% entre 2019 y 2020.

La esperanza de vida disminuyó un 3.7% para los hispanos, pasando de 81.8 años a 78.8 años. La disminución de un solo año fue la mayor desde que los CDC comenzaron a rastrear los datos para el grupo.