El representante Kevin McCarthy, líder republicano de la Cámara de Representantes, ha amenazado con tomar represalias contra cualquier empresa que cumpla con el comité del Congreso que investiga los disturbios del 6 de enero, después de que el panel pidiera a docenas de empresas que preservaran los registros telefónicos y de redes sociales de 11 miembros de extrema derecha del Congreso que presionaron para anular los resultados de las elecciones de 2020.
La advertencia del Sr. McCarthy fue una escalada de sus esfuerzos para frustrar una contabilidad completa del ataque mortal en el Capitolio llevado a cabo por una turba pro-Trump, y su último intento de aislar al ex presidente y a los legisladores republicanos del escrutinio de cualquier vínculo con la violencia. Se produjo después de que encabezara la oposición del Partido Republicano a la creación de una comisión bipartidista independiente para investigar los disturbios, y después sacara a cinco congresistas republicanos del comité especial que los demócratas crearon por su cuenta, boicoteando los procedimientos.
En las órdenes de preservación que el comité especial envió a 35 empresas tecnológicas esta semana, los miembros del panel incluyeron los nombres de cientos de personas cuyos registros podrían querer revisar, entre ellos algunos de los aliados más ardientes de Donald J. Trump en el Congreso, según varias personas familiarizadas con los documentos que no estaban autorizadas a hablar sobre su contenido.
