El estigma de creer realmente en las vacunas es tan poderoso en algunas comunidades que millones de estadounidenses se vacunan en secreto para evitar reproches, a pesar de que se ha demostrado que las vacunas son seguras y eficaces.
Alrededor de 1 de cada 6 personas vacunadas contra el COVID-19 dicen que mantienen esa información en secreto al menos de algunas personas, mientras que más de 1 de cada 17 no se lo dicen a nadie, según una encuesta de Harris Poll. Con más de 174 millones de personas totalmente vacunadas en este país, eso suma más de 10 millones que se niegan a compartir esa información.
En muchos casos, las personas vacunadas lo ocultan porque saben que otras personas en su vida no lo aprobarían.
“Me sentía muy incómodo con la idea de hacer saber al supervisor que iba a vacunarme contra el COVID”, dijo William, un trabajador de una fábrica de Maine cuyo jefe difundió información errónea sobre las vacunas. “Me parece bastante hostil”.