Más de 14,500 migrantes, en su gran mayoría haitianos, se enfrentan a las altas temperaturas y a las malas condiciones de un campamento situado bajo un puente en Del Rio, Texas.
Están a la espera de ser deportados o de decidir si se quedarán para pedir asilo. Los haitianos llevan semanas cruzando a Estados Unidos, pero el número de migrantes alcanzó nuevos niveles en los últimos días, dijo el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro N. Mayorkas.
Unos 3,500 migrantes del campamento ya han sido reubicados, y se esperaba que otros 3,000 fueran trasladados a otra instalación de procesamiento, dijo Mayorkas.
Al menos tres vuelos de deportación con 145 pasajeros cada uno llegaron el domingo a Puerto Príncipe, la capital de Haití, y el gobierno estadounidense espera aumentar a seis los vuelos de deportados para el martes.