Actualmente ya se han registrado muchos casos médicos donde las personas se quejan de un dolor en el dedo pulgar, el cual es ocasionado por el constante uso del celular.
Un reciente estudio realizado por investigadores europeos, se puso en la tarea de explorar la relación del uso de los teléfonos y tabletas, y las nuevas patologías en este dedo.
“Hemos detectado una relación directa entre la ocupación de la persona y el origen del dolor en el pulgar”, dijo un portavoz de la investigación, asegurando que se están generando cambios en la posición física de este dedo, que podrían influir en su propia evolución futura.
“Las enfermedades están cambiando. En las consultas cada vez más nos encontramos con pulgares atrofiados, incluso ya se habla de la tendinitis del i-Phone”, afirmaron.
“Si al igual que ocurrió en el cerebro del primate cuando al bajar de los árboles su estructura cerebral fue cambiando conforme la mano empezaba a utilizarse para realizar otras funciones diferentes, nos preguntamos si el paso del tiempo no dejará esa huella en la actualidad con el cambio de uso del pulgar, el dedo clave en la presión y funcionalidad de la mano en los seres humanos”, plantearon.