El invierno hace que aumente el dolor en las articulaciones especialmente en los adultos mayores, aunque los más jóvenes también pueden verse afectados.
Cuando baja la temperatura, cambia la presión atmosférica y con ello los músculos y tendones se contraen ocasionando rigidez en las articulaciones.
¿Qué se puede hacer para proteger las articulaciones ante las bajas temperaturas?
• Hay que hacer ejercicio para favorecer el movimiento de las articulaciones, fortalecer los músculos y mejorar la circulación. Para evitar lesiones, se recomienda primero hacer ejercicios de calentamiento.
• Después de ejercitarse es conveniente tomar un descanso para que el cuerpo descanse y se relaje. Un buen sueño también ayuda mucho.
• Prestar especial atención a la postura y estar conscientes de mantener la espalda recta para evitar inconvenientes.
• El abrigo es fundamental en invierno, así que sin importar la edad que se tenga, hay que cubrirse y protegerse del frío.
• Alimentarse adecuadamente con frutas, verduras que sean ricas en vitaminas y minerales como la vitamina C, calcio y magnesio.