Una oleada de nuevos casos de Omicron está empezando a surgir en Estados Unidos y podría alcanzar su punto álgido ya en enero, según han advertido los Centros de Control de Enfermedades (CDC), mientras los estados se apresuran a prepararse para la sobrecarga de los hospitales. En Estados Unidos se han superado las 800,000 muertes, de las cuales 1 de cada 100 estadounidenses tiene más de 65 años.
La variante Omicron representaba casi el 3% de los casos de Covid en EE.UU. hasta el sábado, frente al 0.4% de la semana anterior, según datos de los CDC. Se espera que la variante siga aumentando rápidamente, basándose en las experiencias de otros países, y podría ser dominante en unas semanas.
“Sospecho que esas cifras se van a disparar drásticamente en las próximas dos semanas”, dijo el miércoles a la prensa Céline Gounder, especialista en enfermedades infecciosas y epidemióloga de la Universidad de Nueva York y del Hospital Bellevue. Espera que la oleada de Omicron alcance su punto máximo a finales de enero y que luego baje en algún momento de febrero.
