Por eso, la sensación de alivio, de euforia, que inundó la capital del cine durante el fin de semana, cuando “Spider-Man: Sin salida” llegó con unas ventas de entradas sensacionales, fue palpable.
“No Way Home” recaudó unos 253 millones de dólares en los cines de Estados Unidos y Canadá, según Comscore, que recopila los datos de taquilla. No sólo más de 20 millones de personas salieron de sus casas para ver una película de éxito, alejándose de sus servicios de streaming, sino que se enfrentaron a la variante de Ómicron para hacerlo, un reflejo, según los analistas de taquilla, de la novedosa narración del “multiverso” de la película, un deseo reprimido de formar parte de un gran momento cultural y, tal vez, el cansancio por la incidencia de la pandemia en sus vidas.
Fue el resultado más alto del fin de semana de estreno en los 19 años de historia de la franquicia de ocho películas de Spiderman. Y fue el tercero más alto en los libros de historia de Hollywood en general, detrás de “Avengers: Endgame” (357 millones de dólares) y “Avengers: Infinity War” (258 millones de dólares).