La fiscal general del Estado de Nueva York, Letitia James, acusó a la empresa familiar de Donald J. Trump de tergiversar repetidamente el valor de sus activos para reforzar sus resultados, afirmando en documentos judiciales que la compañía había incurrido en prácticas “fraudulentas o engañosas”.
La presentación se produjo en respuesta al reciente esfuerzo del Sr. Trump para bloquear a la Sra. James de interrogarlo a él y a dos de sus hijos adultos bajo juramento como parte de una investigación civil de su negocio, la Organización Trump. La investigación de la Sra. James sobre el Sr. Trump y la empresa está en curso, y no está claro si sus abogados finalmente presentarán una demanda contra ellos.
Sin embargo, la presentación marcó la primera vez que la oficina del fiscal general realizó tales acusaciones específicas contra la compañía del ex presidente. Su ofensiva aumenta la presión sobre el Sr. Trump en su intento de cerrar su investigación, que ha calificado de caza de brujas partidista porque la Sra. James es demócrata.
La oficina de la Sra. James calificó de declaraciones engañosas sobre el valor de seis propiedades de Trump, así como la “marca Trump”. Las propiedades incluyen clubes de golf en el condado de Westchester, Nueva York, y Escocia, edificios emblemáticos como el 40 de Wall Street en Manhattan y el propio pent-house del Sr. Trump en la Torre Trump.
