Gran parte de los estímulos por la pandemia están expirando, y la Reserva Federal subirá los tipos de interés. El gobierno de Biden también está tomando medidas para aumentar el suministro de mercancías. Ha animado a los puertos a permanecer abiertos y ha tratado de aumentar la reserva de conductores de camiones, ampliando los aprendizajes y reduciendo los tiempos de espera para la obtención de licencias.
Aun así, no está claro hasta qué punto bajará la inflación este año. Algunos economistas han señalado que la inflación es ahora tan alta que podría descender en los próximos meses sin dejar de ser incómodamente alta.
La vida de los estadounidenses sigue siendo muy anormal debido a la alteración de la vida cotidiana por la pandemia. Según muchas medidas -salud mental, intentos de suicidio, presión arterial, delitos violentos, accidentes de tráfico y el aprendizaje de los estudiantes- la sociedad no está funcionando bien. Una tasa de inflación lo suficientemente alta como para reducir los sueldos es otro elemento de la lista, y no el más importante.
No es de extrañar que la mayoría de los estadounidenses se sientan frustrados, incluso con Biden. El nivel de vida de la gente e incluso su bienestar físico se están resintiendo. Las familias de bajos ingresos y los niños se están viendo afectados de forma desproporcionada.