La Agencia de Protección del Medio Ambiente (E.P.A.) reanudará la aplicación de límites a la liberación de mercurio, una neurotoxina vinculada a daños en el desarrollo de los niños, procedente de las centrales eléctricas de carbón.
La administración de Biden restableció el lunes una forma de medir los beneficios de la reducción de la contaminación atmosférica, el primer paso de un plan que podría endurecer los límites de la cantidad de mercurio que pueden verter las centrales eléctricas de carbón.
El mercurio es una neurotoxina que supone un peligro especial para el desarrollo cerebral de niños y fetos.
El anuncio sobre el mercurio es una de las medidas recientes adoptadas o previstas por el gobierno de Biden para reducir la contaminación del aire y el agua. Después de un primer año en el que el Presidente Biden trató de impulsar una ambiciosa legislación sobre el clima en el Congreso, pero que quedó estancada, la administración está utilizando su maquinaria reguladora para tratar de frenar la contaminación.