La Edad Media llamada también Medievo es un período histórico de la civilización occidental comprendido entre el siglo V y el XV.
Su inicio se sitúa en el año 476, el año de la caída del Imperio romano y su final en 1492, año en que ocurrió el descubrimiento de América.
En este período hubo muchos cambios en aspectos como la arquitectura, costumbres y prácticas de la sociedad.
A continuación, mostramos algunos datos curiosos de la Edad Media:
BAÑOS DE TINA
Se acostumbraba tomar el baño (una vez al año) en una misma tina por orden patriarcal, es decir, primero el padre, después los hijos mayores seguidos de las mujeres.
El mes de mayo era el preferido para bañarse porque las bodas se celebraban por lo general en junio, cuando los olores eran tolerables todavía.
Para disimular el mal olor, la novia utilizaba un ramo de flores; de allí viene la tradición del ramo de la novia.
ABANICOS
Como podemos apreciar en las películas que recrean esa época, las mujeres utilizaban abanicos y no lo hacían para calmar el calor sino el mal olor que exhalaban las personas por debajo de la ropa.
ENFERMEDADES
Durante el período comprendido entre los años 1346 – 1353 apareció una peste que acabó con un tercio de la población europea.
Los cementerios no daban abasto y los sepultureros llegaron a vaciar unas tumbas para colocar nuevos cadáveres.
PERROS: FIELES AMIGOS
Se dice que el perro es el mejor amigo del hombre y en esa época también era así.
En las cruzadas, los caballeros llevaban los perros para olfatear y rastrear las presas.
Algunos caninos eran tan valiosos, que les colocaban armaduras para protegerlos de las heridas en combate.
CUERNOS
Los señores feudales ponían una cornamenta de ciervo en la casa del marido mientras daban cuenta de sus privilegios.
El adulterio no era un chiste, ya que había venganza y la justicia muchas veces indultaba al agresor del crimen porque alegaba haber actuado movido por el dolor y la ira.
RELIGIÓN
Aunque en esta época existían muchas personas piadosas y extremadamente religiosas (místicos, peregrinos y creyentes flagelantes), también había personas que no creían en la ascensión al cielo sino que el alma desaparecía al morir.