La depresión que sufren los papás es en realidad un fenómeno que no es tan común, pues esta afecta entre un 2% a un 25% de los hombres durante el embarazo de su pareja y hasta un año después del nacimiento del bebé.

Según una investigación realizada por la American Academy of Pediatrics, este porcentaje puede aumentarse a un 50% cuando su pareja también sufre de depresión durante o después de su embarazo, la cual puede afectar negativamente el bienestar de la familia, sobre todo el de los niños.

Por otro lado, el nacimiento de un bebé genera nuevas demandas y responsabilidades que causan grandes cambios en la vida de un padre. Por eso, es importante estar atento a los síntomas, los cuales son: irritabilidad, impulsividad y sentirse incapaz de encontrar placer en las cosas.

Recuerda tratar a tiempo esta enfermedad, pues numerosos estudios han descubierto que los padres que sufren de depresión postparto, tienden más a consumir sustancias y a generar violencia intrafamiliar, por lo que es algo que no se debe tomar a la ligera.