Los expertos afirman que las personas más vulnerables son las que más se benefician de otra dosis de refuerzo.
A medida que los recuentos de casos de coronavirus siguen cayendo, la inmunidad de las personas también puede estar disminuyendo. Varios estudios han descubierto que, aunque las vacunas de refuerzo contra el ARNm han tenido éxito a la hora de prevenir la hospitalización y la muerte, su eficacia contra las infecciones está disminuyendo.
No es de extrañar, pues, que a última hora del jueves Moderna solicitara a la Administración de Alimentos y Medicamentos una autorización de uso de emergencia para una segunda vacuna de refuerzo para todos los adultos. La solicitud de la empresa se produjo apenas unos días después de que Pfizer y BioNTech pidieran una autorización de emergencia para un segundo refuerzo de su vacuna contra el coronavirus para personas de 65 años o más.
Moderna dijo que su solicitud, mucho más amplia, daría a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, así como a los proveedores de atención médica, más flexibilidad para determinar quién se beneficiaría más de recibir una vacuna de refuerzo adicional y cuándo.
Los científicos y los médicos están muy divididos al respecto. “No creo que todo el mundo deba recibir otra vacuna de refuerzo ahora mismo”, dijo la Dra. Yvonne Maldonado, médico especialista en enfermedades infecciosas pediátricas de la Universidad de Stanford. “Pero no veo ninguna razón por la que no debamos empezar a revisar los datos disponibles”.