La población penitenciaria de Massachusetts se encuentra en el nivel más bajo de los últimos 35 años porque “se ha dado a los presos la posibilidad de tomar decisiones positivas en la vida, creando nuevos servicios de reincorporación y capacitándolos para que reconstruyan sus vidas de forma significativa”, afirma el secretario de Seguridad Pública, Terrence Reidy.
Solo hay 6,000 personas encarceladas en prisiones. Y una de las prisiones más antiguas está a punto de cerrar definitivamente: El centro MCI-Cedar Junction, inaugurado en 1956, funciona al 68% de su capacidad y alberga a unos 525 hombres.