La compañía estatal rusa de gas ha anunciado la “suspensión total” de los suministros de gas natural a Polonia a través de un importante gasoducto, en una escalada del conflicto económico derivado de la guerra en Ucrania.
Polonia obtiene más del 45% de su gas natural de Rusia, y el corte de ese suministro podría perjudicar seriamente la capacidad de Polonia para calentar los hogares y hacer funcionar las empresas. A diferencia de algunos de sus vecinos, Polonia quema carbón y no gas, para la mayor parte de su electricidad, por lo que es menos vulnerable en ese frente.
La compañía estatal de gas búlgara dijo que también había recibido el martes el aviso de que sus suministros rusos, que pasan por un gasoducto diferente, serían cortados, pero el impacto de esto no está claro. Los legisladores búlgaros dijeron que planeaban sustituir los suministros rusos por completo a través de un gasoducto desde Grecia, a partir de este verano.
Desde la invasión rusa del 24 de febrero, Estados Unidos y sus aliados han impuesto sanciones económicas cada vez más estrictas a Rusia, lo que ha dañado gravemente su economía. Para la Unión Europea, la parte más dura de esa campaña ha sido intentar desprenderse de los combustibles fósiles rusos, la principal fuente de ingresos exteriores de Moscú.