Los legisladores de Oklahoma aprobaron ayer una prohibición del aborto a las 6 semanas siguiendo el modelo de la controvertida ley del aborto de Texas, que permite a los ciudadanos particulares emprender acciones civiles contra los proveedores de abortos para hacer cumplir la ley.

El proyecto de ley prohibirá los abortos en el momento en que un médico pueda detectar una actividad cardíaca temprana en un embrión o feto, lo que puede ocurrir a las seis semanas de embarazo, antes de que muchas mujeres sepan que están embarazadas. Se harán excepciones en caso de emergencia médica.

Esto se produce en medio de un movimiento de los estados liderados por los republicanos para restringir severamente el procedimiento y mientras la legislatura de Oklahoma aumenta su presión para restringir el derecho al aborto.

El proyecto de ley se dirige ahora al gobernador de Oklahoma, el republicano Kevin Stitt, para su aprobación final. Stitt se ha comprometido a firmar todas las leyes que limiten el aborto que lleguen a su mesa.