El café es una bebida estimulante que contiene cafeína. La cafeína se absorbe rápidamente en el torrente sanguíneo y tiene efectos en el cerebro dentro de unos minutos. La cafeína puede mejorar el rendimiento mental y físico, y puede ayudar a mantenerte despierto y alerta.

La cafeína se encuentra naturalmente en muchos alimentos y bebidas, como el café, el té, el chocolate y algunas bebidas energéticas. También se puede agregar a los alimentos y bebidas en forma de polvo o líquido. La cafeína se vende como un suplemento dietético y se añade a muchos productos para el cuidado de la piel.

La cafeína es una droga y, como tal, puede tener efectos adversos si se consume en exceso. La cafeína puede causar insomnio, nerviosismo, irritabilidad, estreñimiento, aumento de la frecuencia cardiaca y palpitaciones. También puede aumentar la ansiedad y causar mareos, dolores de cabeza y náuseas. Si consumes cafeína en exceso, puedes experimentar síntomas de abstinencia, como dolores de cabeza, fatiga y irritabilidad, cuando dejas de consumirla.

La cafeína no es adictiva, pero puede ser psicológicamente adictiva. Si consumes cafeína todos los días, puedes llegar a depender de ella para mantenerte despierto y alerta. Si dejas de consumir cafeína, puedes experimentar síntomas de abstinencia, como dolores de cabeza y fatiga.