Rafael Perrín, actor y director mexicano de cine y teatro, en charla telefónica con Gustavo Adolfo Infante en su programa De Primera Mano, señaló que aun cuando hay actores como don Ignacio López Tarso, quien, a sus 97 años todavía hace teatro, hay que reconocer que este primer gran actor cuenta con los medios físicos para hacerlo, sin embargo, señaló el director de más de 30 obras, en el caso de Silvia Pinal, la cosa es muy distinta:
“Estoy seguro de que al final ella quiere hacer la obra, estoy seguro que ella quiere estar en el escenario, pero tenemos que saber cómo avanzar con estos grandes iconos en el escenario. Tiene que haber un director de escena que sea un productor, tiene que haber alguien que la cuide y que, si van a hacerle un homenaje en vida, qué bueno que se lo hagan, pero que sea un homenaje en donde la gente disfrute verla y celebre verla, no que sientas una tristeza absoluta por una exposición completamente desprotegida de una actriz”, señaló el actor y director de 61 años.
En cuanto a la escenografía, Gustavo Adolfo reclamó a la producción que con el avance tecnológico que existe hoy en día, la obra está completamente desprotegida, ya que el set es una infame pintura hecha a mano y una iluminación estática de teatro casi experimental, sin pantallas y que para ser una despedida para doña Silvia Pinal es realmente muy inmerecido.
A lo que Rafael Perrín señaló:
“Además estamos hablando de un ícono de nuestra trayectoria artística, entonces esto suena a una exposición para obtener dinero, no hay ni siquiera una función de teatro corriente, sino a la exposición para querer ganar dinero a costa de una leyenda viva y que merece todo nuestro respeto y que deberíamos cuidarla y protegerla”.
Perrín recordó que, en una ocasión, cuando hacían La Dama de Negro y don Germán Robles se enfermó, ellos quisieron hacerle un homenaje en vida ya que él no podía caminar. Pensaron en sacarlo en silla de ruedas, y subrayó, solo en la parte final para que él dijera la línea final y la respuesta de don Germán fue “¿Dar pena? ¡No! ¡Eso nunca!”, recordó el productor.
“Entonces, ahora no puedes tú aprovecharte de la buena intención de una actriz como Silvia Pinal, para exponerla de esta manera tan vergonzosa”, sentenció Rafael Perrín.