Una política del gobierno de Biden que ordenaba a los agentes de ICE dar prioridad el arresto de inmigrantes indocumentados considerados como una amenaza para la seguridad ha sido suspendida, haciendo que millones de personas sean vulnerables a la deportación.

Un juez federal de Texas declaró ilegal esa política de priorización el 10 de junio, y el Departamento de Seguridad Nacional dijo que, en virtud de esa sentencia, no podía establecer prioridades sobre la forma en que sus agentes aplicaban las leyes de expulsión de inmigrantes del país.