Frecuentemente nos encontramos con el dilema en la que tenemos muchas cosas que hacer, pero no sabemos por cual comenzar.
Muchos nos angustiamos y estresamos porque entramos en un bloqueo mental, pues sentimos que todo es importante y no queremos quedar mal con nadie.
En ocasiones nos es difícil organizar nuestras prioridades, pues tenemos un conflicto interno entre las cosas que queremos y las que sabemos que nos convienen.
A continuación, te explicamos cómo organizarte:
1. Enumera todas tus tareas:
No te preocupes por el orden ni la prioridad.
2. Separa lo urgente de lo importante:
Estamos hablando de trabajo, el cual, si no se completa en el tiempo establecido, podremos tener problemas.
3. Evalúalas por su valor:
Revisa su importancia e identifica el valor que implica cada una de ellas.
4. Organízalas según el esfuerzo estimado:
Comienza con la que sabes que te implicarán un mayor esfuerzo.
Los expertos sugieren la táctica de comenzar la tarea más larga primero, pues así la realizarás con más concentración y la terminarás más rápido
5. Ten claro cuándo terminar:
Lo más probable es que no puedas cumplir toda tu lista. Después de revisar, elimina las tareas restantes de tu lista y céntrate en las prioridades que sabes que debes completar durante el día.