Los bomberos superaron finalmente el martes lo que las autoridades describieron como el peor incendio de la historia de Cuba, que durante cinco días destruyó el 40% del principal depósito de combustible de la isla caribeña y provocó apagones masivos.
Testigos informaron que las voraces llamas que asolaron un segmento de cuatro tanques del superpuerto de Matanzas se habían apagado y las altísimas columnas de humo negro que salían de la zona habían disminuido y ahora eran mayoritariamente grises.
Matanzas es el mayor puerto de Cuba para la recepción de crudo y la importación de combustible. El crudo pesado cubano, así como el fuel y el gasóleo almacenados en Matanzas en 10 enormes tanques, se utilizan principalmente para generar electricidad en la isla.