Bad Bunny se ha consolidado en el mundo de la música como uno de los artistas de reggaetón más importantes, ya que sus éxitos han conseguido llegar a las listas musicales más reconocidas y prestigiosas año tras año.
El puertorriqueño de 28 años ha logrado alcanzar números que nunca imaginó con su último disco “Un Verano Sin Ti”; ha podido contar con colaboraciones de varios artistas que también son una representación clásica de lo que el reggaetón y otros géneros contienen en su propuesta musical.
El sabor de esta gran suma de dinero, que se traduce en unos 18 millones de dólares, le permite permitirse lujos como uno de los coches más exclusivos del mundo.
Entre sus posesiones más caras se encuentra un Bugatti Chiron, un modelo de coche que no sólo vale más de 3 millones de dólares, sino que es muy exclusivo, ya que sólo se conocen 20 ejemplares y uno de ellos pertenece a Bad Bunny.
Según una entrevista con el medio Mosic, en la que el artista fue preguntado por esta compra aparentemente impulsiva, Bad Bunny contestó de forma muy contundente por qué había decidido comprar un coche tan caro, ya que había sido criticado por ello después de que “nadie quisiera alquilarle el Bugatti”.
El periodista le preguntó al puertorriqueño sobre el mensaje que quería enviar a la gente, ya que su imagen siempre ha sido que no es una personalidad de lujo ni de ropa cara, “¿cuál era el mensaje? ¿Que no llevas ropa, que eres un tipo sencillo? El artista le contestó tajantemente: “El mensaje es que no llevo ropa, pero si quiero, me voy al Polo Norte. Me he pegado al Polo Norte, ese es el Bugatti, esa es Blancanieves”.
Según “El Conejo Malo”, sólo ha utilizado este modelo, que, como he dicho, es uno de los 20 que existen, 3 o 4 veces, por lo que se podría pensar que fue un gasto innecesario o una pérdida de dinero. Sin embargo, Bad Bunny no está de acuerdo porque, como dice, “después de todo, trabajo para él”.
Hace unos días se produjo un incidente en el que un Lamborghini Urus chocó contra su Bugatti Chiron mientras estaban en la inauguración de su restaurante Gekkō, el primer restaurante chino que el cantante ha abierto en Miami.
Según algunos vídeos, en medio de la multitud y debido a las prisas de la gente y de los coches que intentaban aparcar en la zona de apertura, el Lamborghini colisionó ligeramente con el Bugatti de Bad Bunny, que no sufrió daños importantes.