Los investigadores han encontrado los genes que detienen e invierten envejecimiento de las medusas inmortales.
Una especie de medusa inmortal tiene doble copia de los genes que protegen y reparan su ADN. El hallazgo podría dar pistas sobre el envejecimiento humano y las enfermedades relacionadas con la edad.
Las medusas comienzan su vida como larvas a la deriva. Con el tiempo se adhieren al fondo marino. Los habitantes del fondo se clonan a sí mismos y brotan en medusas con forma de paraguas que nadan libremente.
Cuando los tiempos se ponen difíciles, funden sus cuerpos en quistes amorfos, se adhieren al fondo marino y vuelven a convertirse en pólipos y así pueden reiniciar el ciclo indefinidamente para eludir la muerte por vejez.