Los niños son seres muy sensibles y por lo tanto, son muy buenos observadores de sus propias emociones y las de los demás. A menudo, los niños son mejores que los adultos para detectar el estado de ánimo de la gente que les rodea. Si detectan que algo anda mal, se preocuparán y tratarán de ayudar. Si, por el contrario, ven que todo va bien, estarán felices.
A continuación te presentamos algunas señales que indican que tus hijos son niños felices:
1. Son risueños y tienen una gran sonrisa.
2. Se les ve contentos y llenos de energía.
3. Tienen un buen apetito y duermen bien.
4. Son amistosos y sociables.
5. Juegan con otros niños y se divierten.
6. Tienen buenas calificaciones en la escuela.
7. Ayudan en casa sin que se lo pidamos.
8. Se expresan libremente y no tienen miedo de decir lo que piensan.
9. Nos respetan y nos muestran cariño.
10. Aceptan a los demás tal y como son.
Si tus hijos presentan estas señales, es muy probable que sean niños felices. Disfrútalos mientras puedas, ya que el tiempo vuela y antes de que te des cuenta, se habrán convertido en adolescentes.