En Francia, la plataforma de economía colaborativa acogió a miles de inmigrantes durante la pandemia, según los sindicatos. Ahora los está desactivando en masa.
En París, cientos de manifestantes, muchos en bicicleta, corearon: “justicia para los mensajeros” y “documentos para Uber Eats”. La ira comenzó a extenderse cuando Uber Eats desactivó las cuentas de decenas de mensajeros.
Los manifestantes acusan a Uber de explotar la precariedad de los trabajadores indocumentados y de utilizarlos para ingresar y retirar muchos mensajeros según la demanda suba y baje.
La empresa facilitó a los trabajadores indocumentados la solicitud de trabajo en su plataforma durante la pandemia, cuando la demanda de comida a domicilio era alta, dicen los sindicatos.