Aunque para la mayoría de nosotros sea muy extraño, la tradición de que los hombres usen falda en Escocia comenzó en el siglo XVI, donde por las condiciones climáticas, se empezó a utilizar una túnica llamada “kilt”, la cual cambió con el tiempo y adoptó la forma de una falda.

Sin embargo, a pesar de su larga historia, en el año 1788 las faldas comenzaron a ser prohibidas en Inglaterra y Escocia, pues eran consideradas un símbolo de rebelión, pero aun así logró mantenerse vigente como una prenda típica de Escocia.

Aunque suene difícil de creer, esta falda debe utilizarse sin ropa interior, ya que la tela con la que la hacen es tan gruesa, que ofrece el calor y la libertad necesaria.

Cabe resaltar que esta prenda escocesa se le denomina “kilt”, la cual puede ser utilizada por personas de ambos sexos y es un símbolo de hombría.