Cuando se trata de un resfriado o una gripe, hay una variedad de remedios caseros que los latinos utilizan.
Algunas especias comunes, como el orégano, el ajo y el chile, tienen propiedades inmunizantes y se utilizan a menudo en la cocina latinoamericana. Así que no es de extrañar que muchas personas recurran a estos ingredientes cuando se sienten mal.
Un remedio casero muy popular en México es el agua de orégano, una infusión hecha con hojas de orégano secas, clavo y canela. Algunas personas también añaden un poco de miel para endulzarlo. Se cree que este té ayuda a aliviar la congestión y a calmar el dolor de garganta.
Otro remedio casero muy popular es el caldo de pollo. Esta sopa suele hacerse con ajo, cebolla, zanahorias y apio. Se cree que ayuda a eliminar la congestión y es un alimento reconfortante cuando uno no se siente bien.
Muchos latinos también confían en tomar un baño caliente con sal de Epsom. Se cree que esto ayuda a aliviar los dolores musculares que suelen aparecer con un resfriado o una gripe.
Así que, si te sientes mal, hay una variedad de remedios caseros que puedes probar. Desde sopas hasta tés y baños, seguro que hay algo que puede ayudarte a sentirte mejor.