¿Por qué no la recetan más médicos?

Años después de que se demostrara su eficacia, una nueva herramienta para prevenir las infecciones de transmisión sexual (ITS) está a punto de entrar en la medicina convencional.

Se trata de doxyPEP, un antibiótico que funciona como la píldora del día después, pero que, en lugar de prevenir el embarazo en las horas siguientes a las relaciones sexuales sin protección, previene ITS como la clamidia y la sífilis.

En octubre, el departamento de salud de San Francisco se convirtió en la primera autoridad de EE.UU. en publicar unas directrices que recomiendan la doxyPEP.

Y aunque San Francisco está preparada para extender la doxyPEP, los organismos de salud pública, como los CDC, aún no han emitido recomendaciones en apoyo del uso de la píldora. ¿A qué se debe el retraso?

El principal obstáculo es que al hacerlo se desencadene un peligroso juego de enfermedades infecciosas, es decir, que al tratar de mitigar una crisis de salud, empeoremos otra.