Julión Álvarez ha regresado y en grande, aunque no dejó de trabajar nunca, la realidad es que sí era más difícil presentarse en ciertos escenarios por cuestiones contractuales y aunque en sus épocas doradas hace unos años, su agenda no tenía prácticamente ningún descanso, parece ser que todavía no agarra el ritmo que se necesita para la extenuante serie de eventos que se están programando, y dicen por ahí que el tiempo cobra factura. Pero ¿Qué le pasó a Julión que acabó en el hospital? Eso sí, se dejó ver muy bien acompañado.

Álvarez se presentó apenas en el Palenque de Tlaxcala y fue cuestionado sobre la agresión de la que fue víctima cuando le aventaron un bote de cerveza, esto afortunadamente dijo no pasó a mayores, pero lo que sí no le dio tregua fue ¡La Vesícula! 

Muchos pensarían que quizás la garganta se había lastimado, más porque ya pasó por una cirugía, pero no. “Qué bueno que tocan el tema, veníamos de 15, 16 fechas seguidas, pero no fue la voz, me tuve que ir al hospital porque se me inflamó la vesícula y sentí un dolor en las costillas derechas que empezó poco a poco pero pasando las horas ya tenía mucho dolor, y me tuve que salir”.

Pero al ser un famoso con muchos buenos amigos y colegas, siempre hay quienes ayudan a salvar las tempestades: “Mi compa Luis se había venido a México, y se dejó ir a Guadalajara para la presentación, nomás de compas y también estuvo Josi Cuen, entro a cantar, no podía agarrar aire y ellos me echaron machín la mano, no podía cancelar porque ya estaba toda la raza ahí, me esforcé lo más que pude pero como la vesícula está abajo del diafragma pues no pude, se me salió de las manos”.

Desafortunadamente solo tuvo un día de descanso y espera durante lo que resta de la semana, poder reposar un poco más y sobre todo tomar cartas en el asunto para entender por qué le sucedió eso y si debe tomar algún tratamiento.